Andrés de la Rosa, diputado federal, hizo un llamado a dependencias federales para evitar la sustracción de dicha especie.
México, D. F.—
El diputado federal Andrés de la Rosa Anaya hizo un llamado a las dependencias federales como SAGARPA, CONAPESCA y PROFEPA para evitar la pesca furtiva de la totoaba en el Golfo de California, pero principalmente en el puerto de San Felipe.
«Tal pareciera que no se quiere poner orden en esta actividad y en donde la misma Delegación de la SAGARPA en el Estado ha expresado públicamente que existe corrupción y que hay inspectores involucrados en este lucrativo negocio», dijo el legislador.
Andrés de la Rosa calificó como preocupante y un problema severo que afecta a Baja California, pero principalmente al puerto de San Felipe, la pesca furtiva del pez denominado totoaba.
Este martes el pleno de la Cámara de Diputados aprobó reformas al Código Penal Federal con el fin de endurecer la pena de quien pesque especias protegidas como el erizo marino, la almeja generosa y el pepino de mar, entre otras, por lo que el congresista bajacaliforniano subió a la tribuna para señalar la necesidad de poner especial atención a dicha especie.
Señaló que se buscará fortalecer la normatividad para proteger aún más a la totoaba y responsabilizó a las autoridades federales encargadas en la materia debido a que no se brinda una correcta vigilancia para evitar la sustracción ilegal.
«En el caso de Baja California, hay otras especies marinas que también son objeto de la pesca furtiva y que han venido ocasionando un daño a la fauna que existe particularmente en el Mar de Cortés, donde se ubica el puerto de San Felipe, del municipio de Mexicali, como lo es el pez totoaba, en peligro de extinción y que también se habrá de requerir fortalecer la normatividad para proteger esta especie, que en el mercado negro ha dejado ganancias inmensas para quienes se dedican a este tipo de actividades», sostuvo el legislador federal.
Explicó que diversas fuentes ubican el valor en el mercado negro de México del llamado “buche” de totoaba en mil 800 dólares, mientras que en Estados Unidos de Norteamérica llega hasta los 5 mil dólares.
Andrés de la Rosa destacó que además de tratarse de una actividad ilegal que daña a los pescadores formales, también vulnera el medio ambiente, pero principalmente al Golfo de California que ha sido llamado el “Acuario del Mundo” por diversos científicos de talla internacional por su importancia en el ecosistema de nuestro planeta.
Reiteró que las autoridades federales antes mencionadas deberán redoblar sus esfuerzos de vigilancia, supervisión y presentación de las denuncias que correspondan por hechos relacionados a este tipo de pesca.
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